Un hombre de Santa Rosa tuvo en vilo a la policía de La Pampa, Argentina, cuando les contó a varias personas que había matado un extraterrestre, pero que posteriormente los alienígenas se lo llevaron.
ENCUENTRO CON ET
Según el hombre, ocurrió durante un "encuentro" que tuvo con un grupo de entre 5 y 6 individuos en un campo cercano a Luan Toro.
Indica que no alcanzó a agarrarlo porque ocurrió lo que más temía: bajaron dos platos voladores y se llevaron el cuerpo.
Días después, un comisario se acercó hasta su domicilio para saber si era cierta semejante afirmación a lo cual se quejó con un jefe policial por la intromisión de uno de sus oficiales en su investigación.
CRIMEN INTERPLANETARIO
De todo esto formuló una exposición policial que vendría a ser el primer registro formal de un crimen interplanetario.
Alberto Tavernise tiene 59 años y una historia que él jura que es verdadera.
Sabe que es difícil de creer y que muchos piensan que ha perdido la cordura.
Su propia familia le ha pedido que deje de andar diciendo de aquí para allá que tuvo un enfrentamiento con los extraterrestres y que logró matar a uno de ellos.
9 AGOSTO DE 2014
Empero, el herrero santarroseño no puede olvidar aquella noche del 9 de agosto de 2014.
Ocurrieron en un campo a unos 20 kilómetros de Luan Toro, donde Alberto iba habitualmente a cazar. Es una zona del oeste pampeano donde los reportes por avistamientos de luces extrañas y hechos difíciles de explicar son habituales.
"Son seres chiquitos, de 1.20 de altura aproximadamente, ojos ovalados, no emiten sonido pero tienen olor, se mueven como autómatas y parece que usaran un traje gris. La huella que dejan en el piso es muy extraña, con tres dedos hacia adelante y una suerte de espolón, que se hunde en el terreno, hacia atrás", explica.
MATÓ A UN BICHO
La noche que sintió que "los bichos" lo atacaban, Alberto disparó con todo el arsenal que había llevado.
Uno de ellos cayó no muy lejos del apostadero pero Alberto, presa del pánico, no se animó a salir del refugio.
Cuando llegó la madrugada pudo ver que "el bicho" ya no estaba ahí.
A pocos metros de donde había caído estaban los rastros, evidentes a su entender, del aterrizaje de dos platos voladores.
BAJARON LOS PLATOS VOLADORES
En un radio de unos 150 metros a la redonda, el terreno quedó chamuscado e impregnado de una sustancia de color negruzco y contextura gelatinosa.
"Bajaron los platos voladores y se llevaron el bicho que yo había matado", relató Alberto, siempre seguro de su historia.
El cazador sostiene que uno de los ovnis lo "abdujo" y se lo llevó durante casi hora y media. La experiencia que cuenta Alberto es traumática y cargada de imágenes atemorizantes, de las cuales aún no se ha recuperado.
Para reírse o para creer, lo cierto es que en La Pampa hay un documento público que habla sobre la muerte de un ser extraterrestre, esto es, de un crimen interplanetario.
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